EL DESASTRE DEL GOLFO DE MÉXICO

Cuando ha pasado casi un mes y medio de la explosión en la plataforma petrolera del Golfo de México - que costó la vida de once trabajadores cuyos cuerpos aun no aparecen - , todavía no es posible dimensionar el feroz daño ecológico que el desastre está provocando. Al parecer hoy  despues de varios intentos fallidos, dicen que han encontrado alguna solución para detener el derrame de petróleo a las aguas del océano. Pero es muy prematuro para cantar victoria...
Es un desastre por el lado que se le mire; porque tal vez aparezca la solución para detener el derrame de crudo - que es de proporciones impresionantes - ... pero ¿ cómo y qué se puede hacer para detener el irreparable daño al medio marino.??
El petróleo vertido a destajo amenaza toda la fauna marina de la zona. A las especies salvajes y a las playas y estuarios de: Louisiana, Missisipi, Alabama y Florida.
Los especialistas declaran que diariamente se han vertido a las aguas entre 12.000 y 19.000 barriles de crudo.  Esperan que el derrame esté sólo en la superficie del mar ya que si llega a las profundidades submarinas, el daño a los peces y sus huevos, será muy grave.
De veras que cuando miramos todo el daño que se puede generar en un momento, en sitios que parecen tan bien construídos y precedidos de connotados nombres de empresas internacionales, que se ufanan de sus capacidades y eficiencia... no hay mucho que comentar,  Sólo - si es que - cabe reflexionar y aceptar que donde quiera que estemos, en las condiciones que sea, nuestro día a día está sólo en las manos de Dios y nadie más.
Qué pena por los once trabajadores fallecidos de muerte violenta. Por los heridos  y   por el dolor de sus familias.  Por el daño ecológico que aun no se puede medir - porque es un hecho en desarrollo -( las fotos son apenas una mínima muestra de ese desastre).
Por todo ello  y para que ojalá no ocurran accidentes tan lamentables como éste, elevemos una oración.  Humilde y personal  pero con el corazón.  Acompañemos  a nuestros hermanos :  familias angustiadas por la perdida irreparable de sus seres queridos.
Tambien  los mamíferos, aves y peces de la zona condenados a muerte con el  agua envenenada. ¡Cuánto   sufrimiento  en la destrucción y la pérdida !
SEÑOR, FORTALÉCENOS CON TU AMOR!!!!
PERDONA NUESTRA SOBERBIA Y LA FALTA DE PREVISIÓN QUE CONDUCE A LOS DESASTRES...
SIN TÍ NO SOMOS NADA.

PAZ Y BIEN